Vuelta al trabajo con noticias no muy buenas. Me temo que un dinero con el que contaba acaba de decidir irse de viaje sin mí, el hideputa.
En finx, que le vamos a hacer, mis jefes son un bastante ineptos y un pelín ratas. Lamentablemente a veces itentan paliar lo primero con lo segundo. Que raro, en situaciones como esta siempre me siento como si me tocara a mí pagar por la ineptitud de ellos.
Punk rock para un martes de mala gaita:
Stiv Bators es grande, si señor. Y es que ya lo decía Ray Loriga no se donde: nunca salgas de casa sin sentirte, por lo menos, como Hendrix.
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