jueves, 29 de enero de 2009

sábado, 24 de enero de 2009

Porno

Es sabado por la mañana y fuera graniza. Si en un rato saco fuerzas me pondré ropa y me iré al espigón del puerto (eso que la tele tanto desaconseja) a ver romper las olas un rato y puede que incluso a sacar una foto o dos (cutres de amateur que ni siquiera tiene aspizaciones fotograficas, más alla de congelar y recordar un momento y, puede, colgarlo por aqui para que algún aburrido vea lo que yo) no me iré a la cantábrica porque me apetece ver olas, pero no tan de cerca y ademas la semana pasada el temporal se llevó allí a un pobre desgraciado, así que la gente posiblemente te mire como si estuvieras enajenado si te pones allí durante un par d semanas.
Claro que antes ordenaré un poco la casa, que está de leonera subida: hay ropa sucia en el suelo y los platos de la segunda cena de ayer (nosotros solemos cear dos veces, una primera en el curro y luego algo ligero a las tantas mientras leemos o trasteamos con el ordenador)
Trocitos de mi vida esparcidos: ropa, una tortuga de peluche, el DVD de Boondock Saints, la caja del ordenador nuevo y un ordenador viejo para preparar y despedirme de. Normalmente el desorden me molesta muchisimo, pero llevo unos dias bastante zen así que lo llevo bien.
La pitufa duerme, la mañana de sabado para ella es sagrada, y yo trasteo, leo el vivora, escribo aquí leo sobre porno. A mi el porno no me llama como a mucha gente, antes lo veia con palomitas, me reía con los doblajes cutres. De un tiempo a esta parte no, de un tiempo a esta parte me interesa. Y digo que me interesa no como consumidor de kleenex, me interesa como fenomeno. Me gusta ver que se está haciendo porno distinto, porno que no esta enfocado al público habitual. Por primera vez veo porno que si me refleja a mí como ser sexual. Se me hace raro.

Es sabado por la mañana, fuera graniza y dentro de un rato pondré una lavadora y me iré a ver el temporal.
Me gusta mi vida.

miércoles, 21 de enero de 2009

Crivens!

Iron enough to make a nail,
Lime enough to paint a wall,
Water enough to drown a dog,
Sulfur enough to stop the fleas,
Poison enough to kill a cow,
Potash enough to wash a shirt,
Gold enough to buy a bean,
Silver enough to coat a pin,
Lead enough to ballast a bird,
Phosphor enough to light the town,

Strength enough to build a home,
Time enough to hold a child,
Love enough to break a heart.

sábado, 17 de enero de 2009

Sobre la importancia de tener una correcta escala de valores

Por primera vez en mucho tiempo me encuentro ante la imposibilidad de escribir la entrada que me gustaría escribir. No me siento capaz de ensuciar la dignidad de personas que ni leen esto ni internet les importa una higa, y mucho menos de hacerlo para hacerles servir de ejemplo de un tema que ni les va ni les viene.
No lo tengo dentro.
Y eso que muy posiblemente a las personas en cuestión les daría absolutamente igual y el post resultante sería muy bonito y de esos que conmueven y hacen a uno sentirse tocado en lo mas "jondo" y todas esas cosas. Pero por suerte no soy periodista así que puedo prescindir de ello para quedarme con una versión más escueta de lo que me gustaría escribir. Espero que esta versión sepa transmitir de todas maneras mi opinión al respecto de este tema, aunque no contenga la carga sentimental, personal y emotiva que el post que tenía originalmente en cabeza transmitiría. Sirvale saber al lector, inexistente en la mayoría de los casos, que otra versión de este texto existe, en algún lugar de mi alocada cabecilla, donde hay nombres propios de gente que sufrió y murió. Mis agradecimientos a aquellos esporadicos lectores con tanto tiempo libre como pasarse por aquí a leer esto por permitirme que me evite la indignidad de escribir el post original. Pasemos, tras este pequeño preambulo, al post en si:

Las decloraciones de Ramón Calderón, presidente (edit: ex presidente, según leo) del Real Madrid Club de Futbol de que para el sería más facil "irse a trabajar a las minas" que aguantar el infierno que está pasando porque se hayan destapado sus chanchullos y haya perdido su actual poltrona es una muestra de insensibilidad y estupidez supina de tal tamaño que solo sería perdonable en alguien a quien los dioses hubieran señalado con un retraso mental congénito o con una experiencia vital tan escueta que lo más redondo que hubiera visto en su vida fuera una tableta de chocolate sin las onzas de las esquinas. Si de mi dependiera este señor sería considerado persona non grata en toda localidad, comunidad o zona que hay tenido que disfrutar y padecer los orgullos y sufrimientos que se derivan de vivir de la mineria, hasta que realmente se pusiera un mono y un casco y trabajar durante diez o quince años en ese ramo laboral que tan comodo se le presenta ante la dureza de ser presidente de un club de futbol.

PD: Yo juro que no se si es que la gente es gilipollas o es que habla por la mera diversión de oir el sonido de su voz, pero un dia de estos voy a cambiar la prensa por los superlopez, porque los cabreos que me agarro algunos días con las declaraciones de algunos personajes no son ni medio normales.

sábado, 3 de enero de 2009

Los peces son los que no se van a ningún sitio

Ha cumplido noventa años esta semana. Incredible.

Yo lo daba por muerto ya hace una decada o dos, pero no, ahí sigue. Claro que es normal, no lo pone muy facil para que le sigamos la pista el caballero.

Esperemos que no se haya limitado a envejecer.

Feliz cumpleaños Jerome.